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Es una extraña quietud
calma, habitada e incierta
Es haberte acostumbrado al peso de un cuerpo y haber olvidado su color
Es haber sentenciado el vértigo con el beso idéntico
Es haber perdido el gusto verbalizando el gusto
Se ama porque se sabe que se ama , se ama porque no se ve
 en esta vorágine olvidé detener
olvide observar
olvidé te y me.
 El recuerdo  me envuelve , la nostalgia me enamora ... ¿ y la memoria ?  No me puedo escapar de ella
Habitara en mi cuerpo el recuerdo , tu recuerdo que no quema.
No, no  quema
Mierda
¿de quien es el rostro? ,  me confunde el gesto ...
Eres un rostro sin ojos ,  rostro cuyo espejo es el mio
eres ,
eres plural
insustancial
 hecho del mismo material de los  sueños,
 vacío y anclado
No ?
Lo cierto es esta quietud.
Quiero esta quietud ...el cigarrillo de noche, el humo que envuelve mi sueño y la canción que hace más que  sonar
habitarme es una adicción y la carne  libera de ello.
Hoy no quiero carne ,
me espantaron las carnes
 abrasaron mi alma
más no abrazar.
Quiero mis huesos,
me quiero inocua.
 Mis muertos descansan esta noche , por la mañana los vuelvo a besar
 precisamente es lo incierto de esta quietud , los beso más no quiero que despierten.
El silencio no es silencio , el silencio opera como el ruido más dulce en mi cabeza,
bombardean las ideas y la noche atraviesa como el día no es atravesado jamás.
Quiero esto... también el sentir ,
sentir sin pasado
sin historia
sentir- te
sin ti.